La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, arremetió contra la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) por admitir una queja que busca frenar la reforma al Poder Judicial. Durante su conferencia de prensa, Sheinbaum calificó la acción como “sin sustento” y aseguró que esto no detendrá el proceso de elección popular de jueces, magistrados y ministros de la Suprema Corte. “El artículo 39 constitucional es claro: el poder reside en el pueblo, y vamos a seguir adelante con esta reforma”, enfatizó.
La mandataria subrayó que la reforma judicial es un paso crucial hacia la democratización del Poder Judicial, acercando las decisiones de jueces y magistrados a los intereses del pueblo. Este pronunciamiento llega luego de que la SCJN decidiera analizar una controversia presentada por jueces que se oponen a la reforma. Sheinbaum defendió la propuesta como una medida necesaria para garantizar que el Poder Judicial represente verdaderamente al pueblo, y no a intereses aislados.
En respuesta a las críticas sobre la posible afectación a la independencia judicial, Sheinbaum desestimó esas preocupaciones, afirmando que “esto no es un golpe de Estado, es un golpe aguado”. Según la presidenta, el objetivo de la reforma no es debilitar al sistema judicial, sino fortalecerlo a través de una mayor participación ciudadana en la elección de sus integrantes. “La voluntad popular será el eje de esta transformación”, agregó.
Con esta postura, Sheinbaum deja en claro que el gobierno federal seguirá adelante con la reforma judicial, pese a la controversia constitucional. Para la presidenta, la elección de jueces y magistrados representa un avance clave para garantizar una justicia más cercana y transparente, en beneficio de todos los ciudadanos.
Reducción: J. Fernando Mejía