En el municipio de Tejupilco se encuentra un pueblo llamado San Miguel Ixtapan, mismo en el que se continua con la producción de sal de manera artesanal y le hace honor a su nombre que tiene como significado: Ixta= Sal y Pan=Lugar.
Esta se extrae del manantial Huixtallo que expide agua salada, mismo que lleva ese nombre por la Diosa de la Sal, Huixtocíhuatl y que se encuentra a unos metros de la Zona Arqueológica de San Miguel.
Cabe resaltar que solamente se realiza esta práctica de enero a mayo ya que, durante la temporada de lluvia, las precipitaciones les impiden completar el proceso de secado, mismo que se realza a la luz del sol.
Como primer paso de este proceso se debe extraer el agua salina para colocarla en una vasija onda o cazuela y dejarla reposar por tres días hasta que el agua se torne cristalina y así después colocarla en azoteas de cemento expuestas al sol por 3 o 4 días.
Ya que el agua se evaporó y la sal se cristaliza, se extiende para que se le desprenda la humedad a así pueda ser utilizada. El pueblo produce al rededor de una tonelada de sal.
Esta práctica se realiza por 11 familias, mismas que conservan la tradición que ha pasado de generación en generación.