En 2024, México enfrenta una de las reformas más significativas en su historia judicial. Impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, esta reforma busca transformar la estructura del Poder Judicial, especialmente en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), y ha generado un amplio debate político y social.
Principales cambios de la reforma
La reforma tiene varios puntos clave que buscan modificar tanto la composición de la SCJN como el proceso de selección de jueces y magistrados. Entre los cambios más destacados están:
1. Reducción de los integrantes de la SCJN
De los actuales 11 ministros, se busca reducir el número a 9, con el objetivo de hacer más eficiente el funcionamiento del máximo tribunal del país. Además, el mandato de los ministros se reducirá de 15 a 12 años.
2. Elección por voto popular
Este es quizás el punto más polémico. Se establece que, a partir de 2025, los ministros de la SCJN, así como los magistrados y jueces de Distrito, serán elegidos por voto popular, en lugar de ser designados por los poderes Ejecutivo o Legislativo, como ha sido la tradición. Las candidaturas para estos cargos serán propuestas por los tres poderes de la Unión
3. Eliminación de la pensión vitalicia
Se eliminarán las pensiones vitalicias para los actuales y futuros ministros, lo que ha sido uno de los puntos más controversiales para los trabajadores del Poder Judicial.
4. Reestructuración del Tribunal Electoral
El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) también será reestructurado, reduciendo el número de magistrados de 7 a 5, con un mandato de 6 años, sin posibilidad de reelección.
5. Eliminación del Consejo de la Judicatura Federal
Será sustituido por el Tribunal de Disciplina Judicial, encargado de sancionar a jueces y magistrados que incurran en faltas administrativas o de conducta
-Protestas y resistencia del Poder Judicial
La reforma ha sido ampliamente rechazada por varios sectores del Poder Judicial. Los trabajadores han realizado protestas y paros en diferentes juzgados y tribunales del país, argumentando que esta reforma pone en riesgo la independencia judicial y la democracia mexicana. En su defensa, afirman que no luchan por privilegios, sino por preservar el sistema de justicia en México
Uno de los momentos más críticos ocurrió cuando se tuvo que aprobar la reforma en una sede alterna, debido a que la Cámara de Diputados estaba bloqueada por manifestantes judiciales. Esto subraya la fuerte resistencia que ha generado esta reforma, tanto dentro como fuera del Poder Judicial
-La controversia política
La reforma ha polarizado a los partidos políticos. Mientras que Morena, el partido del presidente López Obrador, y sus aliados han apoyado la iniciativa, la oposición, encabezada por el Partido Acción Nacional (PAN) y el Partido Revolucionario Institucional (PRI), ha calificado la reforma como un ataque a la independencia del Poder Judicial y un intento de concentrar más poder en el Ejecutivo.
-El futuro de la reforma
Con su aprobación por los legisladores, la reforma judicial está encaminada a entrar en vigor, aunque todavía puede enfrentarse a controversias legales y acciones de resistencia por parte de los trabajadores del Poder Judicial. Este cambio promete ser un parteaguas en el sistema de justicia mexicano, con consecuencias a largo plazo para la democracia y la división de poderes en el país.
En resumen, la Reforma Judicial 2024 plantea transformaciones profundas en la manera en que se administra la justicia en México, tocando temas sensibles como la elección de jueces y la estructura de la SCJN. Mientras los próximos meses definirán si estas medidas se consolidan o enfrentan mayores obstáculos legales, lo cierto es que ya han marcado un antes y un después en el debate sobre el futuro del Poder Judicial en México.
Redacción: J. Fernando Mejía