De acuerdo con datos del Sistema de Información Geográfica y Estadística Municipal (SIGEM), en aquel inicio de siglo la temperatura máxima promedio fue de 25.8 grados centígrados (78.4 Fahrenheit), indicador que rebasó los 26 grados (78.8 F) en 2003 –con 26.1 (78.9 F)– y los 27 (80.6 F) en 2017, cuando fue de 27.4 grados (81.3 Fahrenheit).
En 2023, agregan los datos, se presentó la temperatura máxima más alta de ese período de más de dos décadas, con 28 grados (82.4 Fahrenheit).
La cantidad de lluvia del año anterior fue, a su vez, de 110.23 milímetros (mm), menos de la mitad de los 226.5 mm del 2022 y del promedio anual –221.2 mm– en esos más de 20 años.
El volumen más alto de lluvia sobre Juárez, se observa, cayó en 2006, con un total de 444.7 mm, 173 mm sólo en agosto de ese año, cuando la precipitación fue mayor que en cualquier otro mes registrado en el monitoreo desplegado por el SIGEM y más, por ejemplo, que todo 2023 o todo 2020.
La misma estadística, compilada por el Instituto Municipal de Investigación y Planeación (IMIP), muestra que, en julio pasado, el promedio máximo de temperatura fue de 40 grados (104 Fahrenheit), el más alto en el período. Ese mes, además, llovieron 7.6 mm, cuando la media desde 2000 para un mes similar ha sido de 43.3 mm.
“Lo que es una realidad es que tenemos un serio problema, no tan sólo en Juárez, sino en el mundo, con el cambio climático, y aunque se está tratando de hacer todo lo posible por parte de los gobiernos, de la ONU, no se está llegando a nada, no se está logrando verdaderamente reducir los efectos invernaderos”, dijo Roberto Mora, director del Instituto Municipal de Investigación y Planeación (IMIP).
“También ha habido una disminución que afecta mucho, a que estos cambios continúen, que es la escasez de agua, entonces eso influye también en que haya esos cambios de clima, el que haya este tipo de comportamientos que tenemos de manera local”, agregó Cristina Arteaga, jefa del área de Medio Ambiente en el mismo instituto.
La información del IMIP sobre temperatura indica que está basada en el Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos.
El Monitor de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), por separado, muestra que en abril pasado se cumplió un año en el municipio con algún grado de escasez, con un nivel “anormalmente seco” hasta la primera quincena de julio, sequía “severa” hasta agosto y sequía “extrema” desde septiembre pasado.
“Vamos a empezar a tener problemas como lo estamos teniendo ahorita, con los incendios forestales, son una serie de consecuencias que esto trae, esta problemática y en la cual no estamos preparados; los incendios forestales que se han dado, por ejemplo, en California, ahorita en Guerrero, en el mismo estado de Chihuahua, no los podemos contener, no tenemos los equipos ni suficientes, no pueden; entonces, pues nada más esperan a que se apaguen solos”, dijo Mora.
“Y eso, conforme vayamos teniendo el problema y vayamos perdiendo las zonas boscosas, se sigue alterando todavía más: menos lluvias, más calor, y es un círculo vicioso, una rueda que poco a poco está empezando a rodar y a rodar más cada vez más rápido, y se están rompiendo pues estas situaciones y eso pone en peligro a la humanidad, no tan sólo a Ciudad Juárez”, agregó.